La Cuaresma es el tiempo propicio para renovarse en el encuentro con Cristo vivo en su Palabra,
en los sacramentos y en el prójimo.
El Señor "que en los cuarenta días que pasó en el desierto venció los engaños del Tentador" nos muestra el camino a seguir. Que el Espíritu Santo nos guie a realizar un verdadero camino de conversión,
para redescubrir el don de la Palabra de Dios, ser purificados del pecado que nos ciega y servir a Cristo presente en los hermanos necesitados.
Agradecidos al Padre por regalarnos esta maravillosa misión de educadores católicos rossellanos, ponemos en sus manos nuestras preocupaciones, deseos y expectativas para este año escolar.
Confiemos en la providencia de Dios y dejemos que Él obre en nuestros corazones.
Les deseamos un muy buen comienzo de clases a todos los integrantes de la comunidad educativa y que Madre Rossello los abrace y guie en su misión. |