180 AÑOS DE FUNDACIÓN. Imprimir

   El Grupo de Espiritualidad Niños Rossellanos junto a sus catequistas, reflexionaron, en distintos encuentros, sobre la infancia y la juventud de Benita hasta que descubrió que Dios, mediante su obispo, la invitaba a la obra.

   Luego de una lluvia de ideas a partir de las palabras “vocación”, “llamado” y “respuesta” y de relacionarlas, prepararon el corazón para compartir un momento de oración y celebración dando gracias por un nuevo aniversario del nacimiento del Instituto “Hijas de Nuestra Señora de la Misericordia”, en una antigua y húmeda casa ubicada en los suburbios en la calle Vico del Vento.


   “El 10 de agosto de 1837, a la tarde, Benita y sus compañeras se instalaron en la “Commenda”.

Habían conseguido un equipo excelente: cuatro bolsas rellenas de paja (las llenaron ellas mismas, en el momento), cuatro sillas empajadas, una lámpara, un libro de piedad, un pequeño crucifijo, una estatuita de la Madre de Misericordia y, como dote, cinco liras donadas por monseñor De Mari.

En la cocina, los utensilios indispensables y una bolsa con papas. …

…¿No era eso un gozo sin par? Poner en práctica el evangelio, vivir con lo esencial: ¿qué más se podía pretender?...

…Era, aproximadamente, la hora del crepúsculo…”


Ha sido un profundo encuentro de acción de gracias. 

Como en aquel 10 de agosto, ¡mantengamos viva la llama de la Misericordia!